Tegucigalpa. En un contundente pronunciamiento, el consejero del Consejo Nacional Electoral (CNE), Marlon Ochoa, instó a que no se divulguen las actas de cierre de las Juntas Receptoras de Votos (JRV) que no hayan utilizado el sistema biométrico, al considerar que su publicación vulneraría la integridad del proceso electoral.
En un comunicado dirigido a las consejeras del organismo electoral, Ochoa expresó su preocupación por la actual configuración del sistema de Transmisión de Resultados Preliminares (TREP), que permitiría incluir en los resultados preliminares las actas de cierre de aquellas JRV donde no se aplicó el control biométrico.
«Hemos invertido más de L.700 millones en tecnologías para garantizar la integridad de los resultados, pero esta decisión ilegal y fraudulenta de algunas JRV de no usar el sistema biométrico pone en riesgo el proceso electoral», advirtió el consejero.
Riesgo de vulnerabilidad y posible fraude
Ochoa subrayó que permitir la divulgación de estas actas equivale a comprometer la transparencia de los comicios, ya que las mismas podrían ser manipuladas. Según su postura, el CNE tiene la obligación de garantizar resultados confiables y alineados con la voluntad popular expresada en las urnas.
«Si bien estos resultados son preliminares, el CNE debe asegurar que reflejen fielmente la voluntad del electorado. De lo contrario, estaríamos incumpliendo el mandato del pueblo y poniendo en riesgo la estabilidad democrática del país», enfatizó.
Ante esta situación, el consejero propuso que el pleno del CNE emita un acuerdo urgente prohibiendo la divulgación de actas de aquellas JRV que no hayan implementado el sistema biométrico.
Decisión clave para la transparencia electoral
El llamado de Ochoa cobra relevancia en un contexto de alta vigilancia sobre el proceso electoral hondureño, donde diversos sectores han alertado sobre posibles intentos de manipulación de los resultados. Según el cronograma oficial, la divulgación de los resultados preliminares comenzará a las 8:00 p.m. del 9 de marzo y concluirá el 8 de abril de 2025, cuando se emita la declaratoria general de resultados.
El uso del sistema biométrico ha sido una de las principales apuestas del CNE para evitar suplantaciones de identidad y fraudes en las votaciones, por lo que la posible omisión de esta herramienta genera alarma entre analistas y actores políticos.
Hasta el momento, el pleno del CNE no ha tomado una decisión oficial al respecto, pero se espera que en los próximos días se debata la solicitud de Ochoa y se determine si las actas sin validación biométrica serán incluidas en los resultados preliminares.