Lo que parecía una fiesta, comenzó con un enfrentamiento violento entre aficionados de barras tanto de Real España como Olimpia.
Todo inició en la parte entre sol sur y este del estadio Morazán, cuando ambas barras comenzaron a lanzarse piedras.
Luego aparecieron los disparos entre ambos lados, dejando al menos cuatro heridos que fueron llevados al hospital.
La Policía Nacional debió lanzar gas para contener la situación y dispersar los seguidores.
De momento, la barra de Olimpia comenzo a ingresar